Monday, March 20, 2006

Las mejores ideas se me ocurren en el baño, como siempre. Me he acordado de El último tango en París, de aquel soberbio Paul que se limitaba a follar con María Scheider, a huir de la sordidez mineral de su vida entre las cuatro paredes ocres de aquel piso parisino. Y en el acto se me ha ocurrido la idea: hacer que este blog sea mi apartamento secreto, el sitio donde digo todo aquello que pienso y siento, todo aquello que oculto a cuantos me conocen. Descarnadamente, sin sentimentalismos decorativos, sin el chantaje de intentar agradar. ¿A quién debería agradar por aquí? A nadie. Igual que a nadie interesa mi opinión sobre películas, músicas o libros, mis tres enfermedades particulares. Qué dulce, escribir para nadie y para todos...
Luego caigo en la cuenta de que, para mayor anonimato, debería cambiar los nombres de mi novio, de mis amigos, de mi familia. Abro la página de blogger.com, elijo una buena música (he elegido el último disco de Marisa Monte, Universo ao meu redor) y poso mis dedos sobre las teclas. Estoy seguro de que será un buen comienzo, de que no será -una vez más- una de esas empresas que el aburrimiento me hace acometer y luego abandonar. Ya estamos aquí. Me pondré cómodo, porque presiento que será un largo viaje.

1 Comments:

Blogger Legabal said...

Siempre esperamos que sea un largo viaje toda empresa que acometemos con ilusión. Madera de escritor no te falta. Lo que más me ha gustado es ese ímpetu por la verdad, por soltar el lastre y ser auténticos, sin tapujos, dejarse la máscara en un rincón del cuarto o ponérsela si te agrada: libertad en dos palabras. Saludos.

5:26 AM  

Post a Comment

<< Home